Diabetes: cómo prevenirla

La diabetes es una enfermedad crónica, que se origina porque el páncreas no sintetiza la cantidad de insulina que el cuerpo humano necesita, la elabora de una calidad inferior o no es capaz de utilizarla con eficacia.

En las personas con diabetes hay un exceso de glucosa en sangre (hiperglucemia), ya que no se distribuye de la forma adecuada. Noemí González, secretaria de la Sociedad Española de Diabetes (SED) explicó en un artículo publicado en el Diario El Mundo, que “la glucosa elevada puede ser perjudicial para todo el organismo, pero principalmente para el corazón, el riñón y las arterias, por lo que las personas que tienen diabetes y no lo saben, tienen más riesgo de problemas renales, infartos, pérdida de visión y hasta amputaciones de miembros inferiores”.

En Chile, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), 1 de cada 10 chilenos y chilenas padece esta enfermedad, mayormente asociada al exceso de peso y al sedentarismo.

A pesar de estas cifras alarmantes, es importante saber que la diabetes se puede prevenir desde temprana edad, aprendiendo principalmente a alimentarnos de manera sana, con el desarrollo de actividad física de manera regular

Aquí te damos cuatro pequeñas recomendaciones para que tengas una vida más sana y evites, en la medida de lo posible, la aparición de la diabetes:

• Perder peso y mantenerlo.

El control del peso es una parte importante de la prevención de la diabetes. Es posible que se pueda prevenir o retrasar la diabetes, al perder entre el 5 y el 10 por ciento de su peso actual. Y una vez que pierde el peso, es importante que no lo recupere

• Alimentación saludable.

Su dieta debe incluir porciones más pequeñas y menos grasa y azúcar. También consumir alimentos de cada grupo alimenticio, incluyendo muchos granos integrales, frutas y verduras.

• Hacer ejercicio regularmente.

El ejercicio tiene muchos beneficios para la salud, incluyendo ayudar a perder peso y bajar sus niveles de azúcar en la sangre. Ambos disminuyen el riesgo de diabetes.

• No fumar.

El cigarro puede contribuir a la resistencia a la insulina, lo que puede llevar a tener diabetes. Si ya fumas, intenta hacerlo con menor periodicidad hasta poder dejarlo por completo.

Y si tenemos niños, lo más importante es enseñarles a comer saludablemente, al menos 4 veces al día, más una colación a media mañana, entre ellos: frutas, yogurt bajo en calorías, cereales en barra y fomentar el ejercicio, para que en su adultez puedan mantener esos hábitos.

Fuente: OMS / https://www.who.int/es